Publicado por Umma1 febrero 14, 2017

                                                                     Irene Brandt


¿Será que la memoria siempre tiende trampas, y nos trae nostalgias de lugares en los que creemos haber sido felices?  
Me parece que esa es la opinión de Beausant. 
No coincido. Hay lugares en los que uno fue feliz y no hay vuelta que darle. 
Si, es verdad que se puede idealizar un PAISAJE, una escena, al igual que una situación futura. 
Creo, que siempre se trata de definir términos.

8 comentarios:

Beauséant dijo...

Creo que, muchas veces, tendemos a idealizar el pasado precisamente por eso, porque es pasado y nos construimos desde lo que fuimos y por eso intentamos verlo con nostalgia y con cierto cariño...

Si pudiésemos volver sobre nuestros pasos, revivir ciertas situaciones, creo que nos daríamos cuenta que no fueron para tanto. Que esa escapada que hicimos con los amigos en un verano de hace quince años fue bastante aburrida, que esa persona a la que juramos amor eterno era, en el mejor de los casos, un gilipollas.

A veces pienso que la memoria retoca sin que nos demos cuenta las viejas fotografías para hacernos más guapos :)

Pero, claro, es sólo una opinión...

**kadannek** dijo...

Yo tampoco concuerdo con Beau. Pienso que hay situaciones que la mente sí las pintó multicolor y hasta con polvo de hadas, pero eso sucede en personas muy específicas, como las que se quedan en el ayer diciendo que "todo tiempo pasado fue mejor" porque no saben crecer ni valorar los eventos presentes de sus vidas. A veces es un autoengaño para soportar el día a día, tiñiendo recuerdos fríos y aburridos. Incluso, también ocurre a la inversa, en la que hay personas que exageran un momento vivido, en que lo recuerdan peor porque no asumen su responsabilidad o están llenas de ego que no asumen el dolor que causaron al resto. Sí, pero como digo, también pienso que habemos personas capaces de disfrutar un momento y luego recordarlo tal y como fue, con la capacidad de evocar lo que sentimos. Los sucesos y recuerdos nos construyen, son la base de la experiencia, y por ende, de la formación de nuestra identidad. Yo recuerdo los paseos en auto con mi padre, las caminas por la playa con mi madre, las citas divertidas con mi esposo, la sonrisa de un amigo que murió, la vez que mi perro saltó de la emoción cuando regresé del hospital. Todos recuerdos muy vívidos, sin tintes que los coloreen.

Ilesin dijo...

Hay lugares que nos roban el alma y que nos hacen sentir de una manera distinta a la acostumbrada, donde los recuerdos florecen y sentimos que podemos alcanzar esa paz en el alma. Muchas gracias por tu visita a mi blog.
Besos

Tesa Medina dijo...

La mente humana está preparada y dispuesta para ficcionar. Por eso creo que nuestra experiencia vital se nutre menos de loq ue realmente hemos vivido, y más de cómo lo recordamos.

Sea como sea, aplico bastante lo que canta Sabina "al lugar donde fuiste feliz no debieras tratar de volver"

Un beso,

Ángela dijo...

Creo más bien, que la mente es la que tiende trampas.
Estoy de acuerdo con Tesa en la cita que menciona. Es más gratificante vivir el presente. Crear la vida.
Inconsistente la vida que se fundamenta en el recuerdo...
Un abrazo Umma

Perfida Canalla dijo...

Yo estoy con Angela en que la mente es tramposa y esta programada para aquello de "Cualquier tiempo pasado fue mejor"...

Por cierto soy Pérfida
Un saludo coleguita

Beauséant dijo...

Lo que propones, **kadannek** es la situación ideal, es verdad, pero hace falta mucha madurez, mucho saber volver sobre tus pasos y aún verte en la distancia para lograrlo.. Por lo que poco que te conozco, por tus textos, no tengo duda de que seas capaz de hacerlo, quizás hasta yo, si me levanto con buen pie, lo consiga... pero de verdad que conozco poca gente que sea capaz de hacerlo. La mayoría nos refugiamos en lo que queremos creer... y, la verdad, tampoco es mala táctica, ¿no?

Beauséant dijo...

ah, y muchas gracias Umma1, he visto y seguido todas tus miguitas , muchas gracias